Comida: Tailandesa
¿Cómo llegar? Metros de Opera (Líneas 2 y 5 y Ramal Opera-Ppe. Pío) y Sol (Líneas 1, 2 y 3)
Precio: Medio (20 € aprox. por cabeza)
Relación calidad/precio: Buena
Andando por la calle arenal y girando en bordadores, nos encontramos con una pequeña puerta en la que leemos: "restaurante tailandés". Decididos a disfrutar de una buena cena fuera de lo típico, subimos las escaleras contemplando la cuidada decoración que nos envuelve en esa atmósfera propia del sudeste asiático.
En seguida nos reciben y nos dan una mesa separada de las demás por unos bajitos tabiques de madera, lo cual es de agradecer, porque las mesas en cuestión, están demasiado pegadas las unas a las otras. Una vez acomodados, nos dan la carta y aunke los platos no son lo que se dice baratos, parecen tener buena pinta sólo por el nombre. Nos cuesta mucho decidirnos, ya que al no haber ido a ningún tailandes, queremos probar prácticamente de todo y al final pedimos un menú degustación de 8 platos diferentes (14€ aprox.) para dos y otro plato de pollo al curry rojo para acabar de llenarnos, que en realidad no hubiese sido innecesario, porque a pesar de que los platos se servían en cuencos aparentemente pequeños, la comida llenaba bastante. Además nos sirvieron el típico arroz que mezclado kon el pollo o el guiso de verduras estaba realmente bueno. La comida a destacar, personalmente, fue una ensalada a base de aguacate, cebolla morada, zanahoria y nose cuantas cosas más; unas brochetas de carne; y el pollo. En general estaba todo muy rico.
En cuanto al servicio no tuvimos quejas, aunque se paseaban bastante alrededor nuestro, sobre todo al final (porque era tarde y querían cerrar). Pero no fueron pesados ni vinieron a retirarnos la comida inoportunamente. En definitiva; una buena cena íntima ke nos salió a cada uno por unos 20€, comiendo hasta llenarnos y como no, con vino.
Etiquetas: Restaurantes
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