RESTAURANTE BAISHAKI

Comida: Hindú

Dirección: C/Lavapiés, 42

Cómo llegar: Metros de Lavapiés (Línea 3) y Tirso de Molina (Línea 1)

Precio: Bajo (10€ aprox. por cabeza)

Relación Calidad/Precio: Buena

En el madrileño barrio de Lavapiés entre la gran oferta de restaurantes Hindús y Árabes, encontramos el Balshaki; restaurante a priori poco aparente, pero que nos sorprendió a pesar de su pinta de mala muerte. Descubrimos en él un claro ejemplo de la cocina hindú a bajo precio.

La opción más económica es el menú, disponible todos los días de la semana. Por unos 10€ pudimos disfrutar de un entrante, plato principal, acompañamiento, postre y bebida. Como entrante elegimos samosa, hechos a base de hojaldre relleno de verduras (parecido a los rollitos de primavera pero de forma triangular). El plato principal tenía también varias opciones; nosotros nos decantamos por el Kurma de pollo y Lamb Masala (guiso de ternera), todo muy especiado y sabroso. Las raciones aunque aparentemente eran escasas, llenaban bastante, sobre todo al mezclarlo con el acompañamiento, que consistía en arroz blanco o polao (arroz con especias). El poco sitio que nos quedó en el estómago lo llenamos con el postre; que por cierto nos costó decidir debido a la gran variedad de la carta. Optamos por una ración de tarta de coco y otra de yema, a cual más rica (no recomendable para los que se empalagan fácilmente con el dulce).

En cuanto a las instalaciones, dejan bastante que desear; sobre todo la "terraza" en mitad de una calle en cuesta. Tampoco es destacable el servicio, que además de tener dificultades con el idioma, debieron pensar que queríamos comer la cena tan rápido como el postre.

En definitiva, un sitio para comer bien por poco dinero. Aunque si lo que buscas es deleitarte con el ambiente, deberías contemplar otras opciones.

RESTAURANTE BALI

Comida: Indonesia
Dirección: San Bernardino, 6 Madrid
Cómo llegar: Metros de Plaza España (Líneas 3 y 10), Noviciado (Línea 2) y Ventura Rodríguez (Línea 3).
Precio:Medio ( 15-20 euros por cabeza )
Relacion calidad/precio: Buena

Situado en una calle en las entrañas del centro de Madrid, encontramos este pequeño restaurante a unos escasos 5 minutos a las espaldas de la Plaza de España.Lo primero que destaca nada mas pasar es la decoracion,con piezas típicas y muy cuidada,que te hace entrar en situación ( o al menos eso creo xk no he pisado Indonesia en mi vida ).El restaurante es bastante "polivalente" con una zona un poco mas íntima, en lo alto de unas escaleras y un salón un poco mas amplio ideal para una cena de trabajo o similar.

La gran mayoría de los platos de la carta giran en torno a las verduras,como en otro tipo de cocinas del sudeste asiático. Nos ofrecen un menú degustación por 16 euros, que si bien nosotros no lo pedimos, lo pudimos ver y la verdad es que parecía delecioso. Eran, si mal no recuerdo, cerca de 12 platos distintos con sus respectivas raciones de arroz,que nunca puede faltar por aquellos lares. También existe un menú mas pequeño, que en realidad konsiste en un único plato de 12 especialidades y por lo tanto mas asequible por unos 11 euros con el que pueden comer 2 personas perfectamente. En este "mini menu" degustacion yo destacaria el pollo con salsa de cacahuete, el cuc-cus con ralladura de coco (¿¿?¿?¿) y el pollo con curry, pero esto ya es una debilidad personal por el curry que me hace no ser objetivo. Nos quedamos con las ganas de pedir Gado-Gado, pero se les habia acabado,asi que la proxima vez que vayamos lo probaremos.

A destacar como curiosidad los hornillos donde te colocaban la comida al traertela a la mesa,el aparatejo en cuestion era una pequeña parrilla con unas velas en la base que mantenia la comida caliente,curioso y muy práctico. El servicio bastante correcto, pendientes en todo momento de ti pero siempre a distancia,algo muy de agradecer.

En definitiva,una buena opción para una cena intima, donde por unos 17 o 18 euros(con vino) por cabeza se puede cenar perfectamente y salir de alli sin tener ni un solo rincón libre en el estomago para nada mas.

RESTAURANTE BANGKOK

Comida: Tailandesa

Dirección: C/ Bordadores
¿Cómo llegar? Metros de Opera (Líneas 2 y 5 y Ramal Opera-Ppe. Pío) y Sol (Líneas 1, 2 y 3)
Precio: Medio (20 € aprox. por cabeza)
Relación calidad/precio: Buena

Andando por la calle arenal y girando en bordadores, nos encontramos con una pequeña puerta en la que leemos: "restaurante tailandés". Decididos a disfrutar de una buena cena fuera de lo típico, subimos las escaleras contemplando la cuidada decoración que nos envuelve en esa atmósfera propia del sudeste asiático.

En seguida nos reciben y nos dan una mesa separada de las demás por unos bajitos tabiques de madera, lo cual es de agradecer, porque las mesas en cuestión, están demasiado pegadas las unas a las otras. Una vez acomodados, nos dan la carta y aunke los platos no son lo que se dice baratos, parecen tener buena pinta sólo por el nombre. Nos cuesta mucho decidirnos, ya que al no haber ido a ningún tailandes, queremos probar prácticamente de todo y al final pedimos un menú degustación de 8 platos diferentes (14€ aprox.) para dos y otro plato de pollo al curry rojo para acabar de llenarnos, que en realidad no hubiese sido innecesario, porque a pesar de que los platos se servían en cuencos aparentemente pequeños, la comida llenaba bastante. Además nos sirvieron el típico arroz que mezclado kon el pollo o el guiso de verduras estaba realmente bueno. La comida a destacar, personalmente, fue una ensalada a base de aguacate, cebolla morada, zanahoria y nose cuantas cosas más; unas brochetas de carne; y el pollo. En general estaba todo muy rico.

En cuanto al servicio no tuvimos quejas, aunque se paseaban bastante alrededor nuestro, sobre todo al final (porque era tarde y querían cerrar). Pero no fueron pesados ni vinieron a retirarnos la comida inoportunamente. En definitiva; una buena cena íntima ke nos salió a cada uno por unos 20€, comiendo hasta llenarnos y como no, con vino.